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No creo que hagan falta excusas para abrir un hilo sobre uno de los compositores más importantes del siglo XX y de la historia de la música, pero por si acaso, diré que, ya que estamos de aniversarios, el próximo día 25 de marzo se cumplirán 125 años del nacimiento en una localidad húngara (que hoy es rumana; Sînnicolau Mare) de Béla Bartók. Gran compositor y gran personaje. Hablemos de él.

¿Cómo destacar algo del gran Bartok?

Pues así, a bote pronto, se me ocurre la Rapsodia para violín y piano (u orquesta) nº 1. ¿A que no sabe Vd. por qué ?

En su día me lo aprendí "superbien": Nagyszentmiklòs

Mi no entender.

Pensar en obra interpretada en viola en cervecería centro Madrid.

Después de una noche de desenfreno y borrachera al lado de Bukowski del que soy inseparable ( comprenderán los motivos, supongo ), me pasé por una tienda de discos y vi el siguiente doble:



¿ me aconsejaríais su compra en alguno de mis escasos momentos de lucidez ?

la suite del mandarín maravilloso la dirige Martinon a la Sinfónica de Chicago !!!!

en primer lugar debo decir que desconozco la grabación por la que pregunta Chinaski
pero teniendo en cuenta la nómina de músicos y su precio económico
parece una compra más que recomendable.

después de haber propuesto como obra de la semana
una partitura de bela bartok,
se me ocurre preguntaros
qué tal esta versión de Castillo de Barbazul ???



Recorded: 02/10/1953 Studio / Live: Live
Conductor - Ensemble: Fricsay, Ferenc - Swedish Radio Symphony Orchestra
Performers: Nilsson, Birgit - Soprano ; Sönnerstedt, Bernhard - Baritone

para escuchar fragmentos http://www.jr.com/JRProductPage.process?Product=4026827

UNA SIMPLE CURIOSIDAD ???

Si el "Concierto para orquesta" es, como supongo, el de Reiner con Chicago, ni se le ocurra perdérselo. Sólo por esa magnífica grabación ya merecería la pena.

Yo nunca me perdería una interpretación de Alexis Weissenberg. Sus interpretaciones siempre se distinguieron por un virtuosismo y una originalidad poco comunes. Su estilo me recuerda en algunas lecturas al de Árgerich por sus tempos frenéticos, aunque su uso del pedal, del cual era un maestro, lo distingue siempre de sus colegas.
Fue una pena que se retirase tan temprano de la escena musical.